sábado, 31 de julio de 2010

Matrimonio en nuestra Iglesia



El viernes pasado, es decir el día 23 Julio se casaron civilmente el hno. Henrry Berrospi con la hna. Karina Sánchez, el matrimonio se llevó a cabo en la municipalidad de Bella Vista en el Callao.
El 24 fue la ceremonia religiosa en nuestra iglesia, nos visitaron muchos familiares y amigos del hno. Henrry y la hna. Karina.

Felicitamos a los esposos Berrospi y deseamos exitos en la nueva etapa de sus vidas. Que el Señor les dé muchas bendiciones.

Razones para esperar en Dios.



Él está arreglando las circunstancias. Los israelitas marcharon alrededor de Jericó por siete días antes de atacarla. La ansiedad y el temor se apoderaron del enemigo, preparando el camino para la victoria. David fue escogido como rey de Israel años antes de ascender al trono y esperó hasta que se cumplió el tiempo de Dios para hacerlo; pero se rehusó a matar a Saúl, pues lo respetó porque decía que era “el ungido de Jehová”.

Él purifica nuestras intenciones. En lugar de actuar impulsados por el placer, la codicia o el orgullo debemos ser motivados por el amor, el servicio y
la obediencia. Si nuestras motivaciones no son correctas, Dios se demorará en bendecirnos, pues su intervención no se concreta a satisfacer nuestros deseos; quiere que captemos la enseñanza que nos imparte.

Dios mismo nos enseña a confiar en Él. Si Él contestara toda oración inmediatamente, quizá no aprenderíamos a confiar en Él. Por eso a
veces Él nos promete que suplirá lo necesario y luego nos pide que esperemos.

Nos protege del peligro imprevisto. El Padre ve todas las cosas y sabe lo que es mejor para cada uno de sus hijos. Quienes se precipitan tropiezan
con dificultades inesperadas.

Nos prepara para dar buen testimonio. Si decidimos esperar hasta que Dios supla nuestra necesidad, nuestras vidas pueden causar un gran impacto en
cuanto a su fidelidad entre muchos de los que nos rodean.

viernes, 30 de julio de 2010

¿Qué significa “esperar en el Señor”?



Uno de los principios fundamentales en la Biblia es que debemos aprender a esperar el tiempo y la dirección de Dios.

Por una parte, implica tener paciencia, es decir, estar dispuestos a esperar, lo que nos lleva a hacer una pausa para recibir más instrucción en lugar de precipitarnos para ejecutar nuestras soluciones.

También demanda que estemos dispuestos a aceptar con calma lo que Él esté haciendo en nuestra vida y confiar en que intervendrá para llevar a cabo su voluntad. Algunos tendrán que desistir de lo que parece ser una necesidad inmediata y resistir la tentación de fijar el momento más conveniente para obtenerla.

Por otra parte, esperar en Él no quiere decir tener una actitud fatalista; más bien es la firme expectativa de que Dios cumplirá lo que
ha prometido.

¿Esperarás en el Señor?

jueves, 29 de julio de 2010

cumpleaños de una gran amiga!!



Ayer fue cumpleaños de la hermana Rocío de Benites.
La Hna. Rocío salió de la iglesia "Macedonia" en Chiclayo para trabajar en la Iglesia de Lince, junto a su esposo el pastor Luis Benites,actualmente tiene dos hijos Benjamin y Fernando. En realidad Rocío ha sido una bendición muy grande en la Iglesia de "Macedonia" y sé que ahora lo está siendo con su familia y también en la Iglesia de Lince. Felicitamos a Rocío y también a su esposo por la labor excelente que estan haciendo en Lince.

!!Dios te bendiga mucho Rocío te amamos y oramos por tu familia y ministerio!!.

miércoles, 28 de julio de 2010

Esperar no es agradable.




La mayoría de nosotros sentimos aversión a cualquier cosa que nos cause demoras: no nos gustan las salas de espera, nos molesta esperar nuestro turno en una “cola” pues queremos obtener lo que deseamos en ese mismo instante.
Esto se debe a que casi siempre estamos muy ocupados y vivimos con mucha prisa.
No obstante, si hemos de crecer como creyentes, una de las lecciones más valiosas de
la vida cristiana es aprender a esperar en Dios. Cuando nos sometemos a los planes que Él ha elegido, nos sorprendemos al ver las cosas maravillosas que hace pues vemos que actúa a favor de quienes esperan en Él, como declara Isaías 64.4. Es decir, es el Dios omnipotente que demuestra su preocupación por los suyos en el momento más oportuno para mostrar su disposición a su favor y sorprender así a sus enemigos (Is 64.2).

martes, 27 de julio de 2010

¿Cuáles son los requisitos para escuchar a Dios?




Meditar y reflexionar en la Palabra de Dios,
Como, por ejemplo, el Salmo 1 y en particular el versículo 2, para adoptar una vida de obediencia.

Escuchar en oración.
Al leer la Biblia, pidamos a Dios su ayuda para saber aplicarla a cada momento y no solo ante los problemas.

Escuchar con espíritu sumiso.
Rogarle que nos faculte para cumplir lo que Él nos ordene, esforzándonos por ser oidores activos, no pasivos.

Escuchar con expectativa.
Es decir, esperando que Él hable a nuestro espíritu para llamar nuestra atención y dirigirnos acertadamente.

Escuchar pacientemente.
Al estar ante decisiones importantes quizá Él nos demande orar por algunas semanas, antes de darnos cuenta de lo que Él quiere decirnos.

lunes, 26 de julio de 2010

¿Cómo podemos saber que Dios nos Habla?



Leyendo su Palabra.
Él jamás nos dirá algo que contradiga lo que ya nos ha dicho sino que
cumplirá fielmente sus promesas.

Teniendo al Espíritu Santo viviendo en nosotros y escuchándolo. Una de sus tareas es guiarnos al hablar a nuestro espíritu y confortarnos,
dirigirnos e impartirnos seguridad, confianza y gozo.

Orando.
La oración consiste en hablar con Dios y escucharlo. Para el efecto, leamos una
porción de la Biblia diariamente y pidamos a Dios que nos permita entenderla para poder aplicarla a nuestra situación.

Al darnos cuenta de que Dios nos habla mediante circunstancias.
Él sabe exactamente lo que hace y por qué lo hace; cierra una puerta y abre otra, pero jamás nos abandona.

Al darnos cuenta de que a veces nos habla por medio de otras personas.
Él puede usar a pastores, amigos, familiares y aun a personas desconocidas. Pero tengamos cuidado y evaluemos todo lo que oigamos a la luz de las enseñanzas de
la Biblia.

martes, 20 de julio de 2010

¿Qué sucede si no escuchamos a Dios?



Escucharemos a alguien más,
Ya sea por lo que escriba, transmita por radio, TV o por
televisión.

Seremos engañados fácilmente,
Pues quizá lo que recibamos por otros medios contradiga la
verdad contenida en la Biblia.

Nos desviaremos hacia el pecado,
Porque la Biblia es el ancla segura que nos mantiene firmes en lo que creemos.

Justificaremos nuestro pecado
Al prestar atención a otras ideas o corrientes de pensamiento que pueden afectar nuestra conducta.

¿Estás escuchando a Dios?

miércoles, 14 de julio de 2010

Cumpleaños de una hermana muy querida



Hoy está cumpliendo años la hermana Hilda Vidal, la hermana Hilda es una hermana muy servicial en nuestra iglesia y también muy colaboradora, para nosotros es una bendición grande tenerla en nuestra iglesia y contar con su fiel colaboración.

Actualmente la hermana Hilda trabaja como auxilar del departamento de Primarios, el cual ha sido muy bendecido, queremos agradecer a Dios por bendecirnos con una hermana que ama mucho a Dios y también a su obra.

!Feliz día hermana Hilda que el Señor le bendiga!.

martes, 13 de julio de 2010

Resultados de la intimidad espiritual



La relación íntima con Dios trae consigo resultados óptimos para el creyente.

Por una parte, nos dará estabilidad,
pues en las tormentas será como ancla inconmovible.

A la vez, tendremos la sensación de seguridad interna.
Nuestro Padre afirma que siempre estará con nosotros, presto para ayudarnos en cualquier situación.

Además,pese a lo que suceda, podremos tener serenidad.
El hecho de conocer a Dios íntimamente produce paz y tranquilidad en nuestro espíritu, pues podemos confiar en que Él nos guiará en cualquier dificultad.

También, la comunión con Él aumenta nuestra sensibilidad espiritual.
Entenderemos mejor los pasajes bíblicos que nos parezcan difíciles, el Espíritu Santo nos hará más sensibles a las necesidades de los demás y aumentará nuestro interés para tenderles la mano.

¿Cómo está nuestra comunión con el Señor?

jueves, 8 de julio de 2010

¿Qué son los problemas?
















LOS QUE PREDICEN: Ayudan a moldear nuestro futuro.
LOS QUE RECUERDAN: No somos suficientes. Necesitamos que Dios y los demás nos ayuden.
SON OPORTUNIDADES: Nos sacan de la rutina y nos hacen pensar creativamente.
SON BENDICIONES: Nos abren puertas por las que, por lo general, no hubiéramos pasado.
SON LECCIONES: Cada nuevo reto será un maestro para nosotros.
ESTÁN EN TODAS PARTES: Ningún lugar o persona está excluido de ellos.
SON MENSAJES: Nos advierten sobre desastres potenciales.
SON SOLUCIONABLES: Ningún problema es sin solución.

martes, 6 de julio de 2010

¿Cómo experimentar la presencia de Dios?



Pidamos a Dios que nos indique cuáles son nuestros pecados
que no concuerdan con lo que Él desee hacer en y por medio de nosotros. Este es un paso indispensable para que Él se encargue no solo de señalarnos nuestros errores, sino de limpiarnos de todo pecado conforme a su promesa (1 Jn 1.9).

Entreguémosle las cosas que son piedras de tropiezo. Quizá queramos aferrarnos a costumbres, métodos o ideas que puedan
impedir que Él asuma absoluto control de nuestra vida y que Él no considere pertinentes.

Estemos en disposición de que Dios nos hable como Él elija. Es decir, que se dé a conocer como Él sabe que tendrá mayor impacto en nosotros y que resulte para su gloria. Estos pasos son indispensables para que entendamos que Él no solo quiere contestar nuestras peticiones sino que anhela que nos
sintamos satisfechos con su presencia y la disfrutemos en toda su plenitud, como Cristo lo expresó en Juan 10.10, diciendo:“Yo he venido
para que tengan vida , y para que la tengan en abundancia”.